Descripción
Los constructores fabrican todas las formidables defensas de la Guardia de la Noche, incluidas las armas de asedio, y también se encargan de su mantenimiento. Aunque el escorpión no es más que el hermano pequeño de las enormes balistas montadas en lo alto del Muro, es perfectamente capaz de disparar un proyectil de tamaño considerable a una gran distancia y con efectos letales. Es fácil de cargar y de apuntar y puede segar filas enteras de tropas enemigas con facilidad. Sin embargo, desplazar este pesado artefacto por terreno escabroso no es tarea sencilla. Además, una dotación de escorpión expuesta a la caballería o a los ataques a distancia no durará mucho en el campo de batalla.