Descripción
En la abarcativa argumentación de estos cuentos, se hacen presentes las personas mayores para avisarnos de lo ilusorio de la vida, y asoma el amor que puede suceder entre esculturas de hielo, en la resonancia del chelo y en la búsqueda de una amiga, aunque haya que atravesar el peligro de la puerta y de la procesión. María Sola, con frases entrecortadas que nos detienen la respiración, convoca a los lectores a jugar al rey desnudo y propone que encontremos el hilo en la vacilación misma para conducirnos por el camino del bosque que nos busca.